Mensaje Pontificio con ocasión de la 93ª Jornada Mundial del Día del Emigrante (17 de enero del 2007).

“¡Queridos hermanos y hermanas!

Con ocasión de la próxima Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado, con la mirada puesta en la Santa Familia de Nazaret, icono de todas las familias, querría invitarlos a reflexionar sobre la situación de la familia migrante. El evangelista Mateo narra que, poco tiempo después del nacimiento de Jesús, José se vio obligado a salir de noche hacia Egipto llevando consigo al niño y a su madre, para huir de la persecución del rey Herodes (cfr Mt 2, 13-15). Comentando esta página evangélica, mi venerado Predecesor, el Siervo de Dios Papa Pío XII, escribió en 1952: "La familia de Nazaret en exilio, Jesús, María y José, emigrantes en Egipto y allí refugiados para sustraerse a la ira de un rey impío, son el modelo, el ejemplo y el consuelo de los emigrantes y peregrinos de cada época y País, de todos los prófugos de cualquier condición que, acuciados por las persecuciones o por la necesidad, se ven obligados a abandonar la patria, la amada familia y los amigos entrañables para dirigirse a tierras extranjeras" (Exsul familia, AAS 44, 1952, 649). En el drama de la Familia de Nazaret, obligada a refugiarse en Egipto, percibimos la dolorosa condición de todos los migrantes, especialmente de los refugiados, de los desterrados, de los evacuados, de los prófugos, de los perseguidos. Percibimos las dificultades de cada familia migrante, las penurias, las humillaciones, la estrechez y la fragilidad de millones y millones de migrantes, prófugos y refugiados. La Familia de Nazaret refleja la imagen de Dios custodiada en el corazón de cada familia humana, si bien desfigurada y debilitada por la emigración.
El tema de la próxima Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado – La familia migrante – se sitúa en continuidad con los del 1980, 1986 y 1993, y pretende acentuar ulteriormente el compromiso de la Iglesia no sólo a favor del individuo migrante, sino también de su familia, lugar y recurso de la cultura de la vida y principio de integración de valores. Muchas son las dificultades que encuentra la familia del migrante. La lejanía de sus componentes y la frustrada reunificación son a menudo ocasión de ruptura de los vínculos originarios. Se establecen nuevas relaciones y nacen nuevos afectos; se olvida el pasado y los propios deberes, puestos a dura prueba por la distancia y la soledad. Si no se garantiza a la familia inmigrada una real posibilidad de inserción y participación, es difícil prever su desarrollo armónico. La Convención internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migratorios y de sus familiares, entrada en vigencia el 1 de julio de 2003, pretende tutelar los trabajadores y trabajadoras migrantes y los miembros de las respectivas familias. Se reconoce, por tanto, el valor de la familia también en lo que atañe a la emigración, fenómeno ahora estructural de nuestras sociedades. La Iglesia anima la ratificación de los instrumentos legales internacionales propuestos para defender los derechos de los migrantes, de los refugiados y de sus familias, y ofrece, en varias de sus Instituciones y Asociaciones, aquella advocacy que se hace cada vez más necesaria. Se han abierto, para tal fin, centros de escucha para migrantes, casas para su acogida, oficinas de servicios para las personas y las familias, y se han puesto en marcha otras iniciativas para satisfacer las crecientes exigencias en este campo”.

Anuncio oficial del descubrimiento del sarcófago de San Pablo.

“No existía ninguna duda de que el sarcófago encontrado debajo del pavimento de la basílica de san Pablo extramuros de Roma fuera verdaderamente el del Apóstol”. Para los estudiosos era clarísimo, pero oficialmente fue en la mañana del 11 de diciembre por el cardenal Andrea Lanza de Montezemolo, el nuevo arcipreste de la basílica, en el curso de una conferencia, en la sede de la oficina de prensa de la Santa Sede. El purpurado ha explicado que era un “dato incontrovertible en la tradición histórica que en la basílica estuviera el sarcófago de san Pablo, mientras que la identificación del sepulcro original hasta ahora era una cuestión abierta”. Finalmente, excavaciones que iniciaron en 2002 y terminaron en septiembre de este año, e “investigaciones arqueológicas en el área tradicionalmente considerada el lugar de la sepultura del santo”, ha señalado el arcipreste de la basílica, han permitido llevar a la luz un importante contexto estratificado, formado por el ábside de la basílica de Constantino, englobada en el transepto del edificio llamado de los Tres emperadores. Y precisamente, debajo del pavimento del palacio de los Tres emperadores, bajo el altar papal, -- ha revelado el cardenal Lanza di Montezemolo -- ha sido descubierto este gran sarcófago, del cual se habían perdido las huellas y que venía considerado desde la época de Teodosio, la verdadera tumba de san Pablo. Según los arqueólogos, la certeza del descubrimiento es “absoluta”. Ahora será el Papa quien habrá de tomar la decisión de abrir el sarcófago para verificar su contenido, si lo creerá necesario. Las investigaciones realizadas hasta ahora se han centrado sólo en la identificación del sarcófago y no en las reliquias de san Pablo.
«Podría preverse un estudio de su interior para satisfacer la curiosidad de quienes se preguntan si dentro se encuentran los restos del apóstol. Pero se requieren las autorizaciones necesarias», añadió.
En la misma rueda de prensa, el cardenal Montezemolo, anunció que las cuatro basílicas patriarcales de Roma se llamarán a partir de ahora basílicas «papales», según manifestó en la misma rueda de prensa el propio cardenal, arcipreste de la Basílica de San Pablo Extramuros. En ella manifestó que «muchos interpretaban que el título de “patriarcal” quería aludir al hecho de que el Papa ejercía, mediante éstas, su título de patriarca de Occidente, en contraste con el Patriarca de Oriente, algo que no es verdad ni mucho menos». Benedicto XVI decidió renunciar, por motivos históricos y ecuménicos, al titulo de «patriarca de Occidente», que entre otras cosas aparecía en el Anuario Pontificio de la Santa Sede.
Las hasta ahora basílicas «patriarcales» de Roma que ahora serán «papales» son: San Pedro del Vaticano, San Juan de Letrán, San Pablo Extramuros, y Santa María la Mayor.
«Las cuatro basílicas habían sido entregadas en el pasado por los Papas como base en Roma para los patriarcas orientales católicos, no como título oficial», aclaró el cardenal, antiguo nuncio apostólico en Italia y delegado apostólico en Jerusalén.

Según la última encuesta realizada por el portal de escritores y periodistas católicos Periodismocatolico.com los santos siguen estando de moda.
Tras las cuatro últimas canonizaciones del pasado 15 de octubre en el Vaticano por el Papa Benedicto XVI, el portal se dio a la tarea de proponer a los visitantes tres opciones sobre el servicio de los santos al mundo de hoy: «sirven para enseñarnos el camino de la salvación»; «sirven como mera referencia a una vida ética» «o no sirven de nada pues la realidad los rebasó ya».
Del total de 165 votos recibidos, 83 por ciento (137 votos) tomaron la primera opción, es decir, que los santos son tan actuales que hoy sirven a todos para enseñarnos el camino de la salvación; 9.1 por ciento de los votantes los ven como referente ético y 7.9 por ciento piensan que la realidad los rebasó ya.
El cierre de la encuesta se ha hecho este martes 28 de noviembre y entre los comentarios a favor de la alternativa mayoritaria se puede leer que los santos son la versión más moderna del ser humano cabal, solidario y fraterno.
Según los que votaron a favor de esta opción, «los santos contrarrestan la falta de amor que hay en el mundo y que su ejemplo nos estimula a seguir a Cristo hasta el final del camino, mostrándonos que es posible encontrarnos a Dios en la vida cotidiana».

En el Discurso a los participantes en la Conferencia internacional organizada por el Consejo Pontificio para la Pastoral de la Salud el pasado mes de noviembre, el Papa puso de relieve cómo el beso al leproso que en su día diera Francisco de Asís, con el que comenzó su conversión, tiene hoy plena actualidad.
“En primer lugar, -- dijo el Papa -- la cercanía al enfermo afectado por enfermedades infecciosas es un objetivo al que la comunidad eclesial debe tender siempre. El ejemplo de Cristo, que, rompiendo con las prescripciones de su tiempo, no sólo dejaba que se le acercaran los leprosos, sino que también les devolvía la salud y su dignidad de personas, ha ‘contagiado’ a muchos de sus discípulos a lo largo de más de dos mil años de historia cristiana.
El beso que san Francisco de Asís dio al leproso ha encontrado imitadores no sólo en personas heroicas como el beato Damián de Veuster, que murió en la isla de Molokai mientras asistía a los leprosos; como la beata Teresa de Calculta; o como las religiosas italianas que murieron hace algunos años a causa del virus del ébola; sino también en muchos promotores de iniciativas en favor de las personas afectadas por enfermedades infecciosas, sobre todo en los países en vías de desarrollo.
Es necesario mantener viva esta rica tradición de la Iglesia católica para que, a través de la práctica de la caridad con quienes sufren, se hagan visibles los valores inspirados en una auténtica humanidad y en el Evangelio: la dignidad de la persona, la misericordia, la identificación de Cristo con el enfermo. Sería insuficiente cualquier intervención en la que no se haga perceptible el amor al hombre, un amor que se alimenta en el encuentro con Cristo”.

Como un vehículo evangelizador, una asociación vinculada a la Virgen de Fátima está enviando, calendarios para 2007 a 300.000 familias españolas.
La Asociación Cultural «Salvadme Reina de Fátima» ha escogido para cada uno de los meses una imagen de la Virgen y una de las frases pronunciadas por María en las apariciones de Fátima.
Gonzalo Raymundo Esteban, presidente de la asociación, afirma: «Este calendario tiene una finalidad evangelizadora» y para ello «he querido poner las principales enseñanzas que nos transmitieron en las apariciones de Fátima: de mayo a octubre encontrarán una frase, con un consejo o una petición de la Santísima Virgen».
Aparte de los mensajes explícitamente marianos de mayo a octubre, el resto de los meses ofrecen editadas otras enseñanzas. El objetivo del calendario es que «todo el que lo consulte, por medio de la mirada de María, sea invitado a atender su llamamiento maternal y sea un bálsamo de consolación en las dificultades de la vida».

Se clausuró en la Basílica Catedral del Belluno (Italia) el viernes 10 de noviembre la fase diocesana de la causa de beatificación y canonización del Siervo de Dios Albino Luciani (Juan Pablo I).
Hace menos de tres años de su apertura -- el domingo 23 de noviembre de 2003, solemnidad de Cristo Rey, en el mismo lugar -- con la primera sesión del tribunal, entonces presidido por el obispo Vincenzo Savio -- murió el 31 de marzo de 2004 --.
Albino Luciani nació el 17 de octubre de 1912 en tal diócesis. Fue elegido obispo de Roma el 26 de agosto de 1978. Escogió el nombre de Juan Pablo I. Falleció el 28 de septiembre, a los 33 días de pontificado. Es conocido entre los católicos como «el Papa de la sonrisa». Como todos los actos de la vida de la Iglesia -- explica la diócesis de Belluno-Feltre --, también este acontecimiento del proceso de beatificación se enmarcará en un evento litúrgico: la fiesta del patrono San Marín de Tours, el primero entre los santos venerados en la ciudad de Belluno y en la diócesis. De esta forma, la solemne sesión de clausura se situará durante la celebración de las primeras Vísperas de la fiesta.
La última sesión del tribunal, igual que la primera, será presidida por el obispo diocesano, actualmente monseñor Giuseppe Andrich. Está prevista, entre otras, la intervención del postulador de la causa, el padre Enrico Dal Covolo, y del vicepostulador, monseñor Giorgio Lise. Se resumirá la historia del proceso y se leerán sus fases.
Entonces todos los pliegos que contienen las actas de las audiencias de los testigos -- se ha oído en total a 190 --, los documentos inéditos reunidos y cuanto ha sido examinado por el tribunal en estos casi tres años de trabajo estarán a la vista de los presentes. Y es que, en acto público, deberán ser cerrados y sellados con el sello episcopal antes de ser enviados a la Congregación vaticana para las Causas de los Santos, dicasterio al que se confía a partir de ese momento el examen de la causa.
El dicasterio considerará, entre otros extremos, la biografía documentada que se le entregue, con vistas a decretar la heroicidad de las virtudes del Siervo de Dios Albino Luiciani, otro paso hacia su beatificación.
Es distintivo del Papa Luciani que «es la figura del buen pastor que da la vida, sin guardarse nada, por el rebaño que le ha sido confiado», sintetizó el postulador de la causa en el diario «Avvenire».
Las páginas de la edición del pasado 28 de octubre recogieron la opinión personal del padre Dal Covolo sobre Albino Luciani: «Veo encarnada en él la célebre máxima de San Agustín: “Es un deber del amor apacentar la grey de Cristo”».
Para la beatificación del Siervo de Dios se necesita la constatación de un milagro atribuido a su intercesión, y ya «hay un caso de curación» que podría tener tales características, mencionó el postulador. La valoración del milagro tendría lugar sólo después de que el dicasterio para las Causas de los Santos proclame las virtudes heroicas de Albino Luciani.
El hecho al que se refiere el postulado aconteció en Apulia (Puglia en italiano), región del sur de Italia: parece que un hombre sanó de un tumor, sin explicación científica posible, tras haber rogado a Dios esta gracia por intercesión del fallecido pontífice.
A la salida de la Catedral de Belluno, tras la clausura de la fase diocesana, se distribuyeron a los numerosos asistentes previstos estampas con la oración que el obispo local ha compuesto para obtener la beatificación de Albino Luciani.
Las estampas tienen una pequeña reliquia procedente de las vestiduras del Papa Luciani.
«Inolvidable para todos nosotros»: así evocó el pasado 28 de septiembre Benedicto XVI a su predecesor, Juan Pablo I, a los 27 años de su fallecimiento -- tan sólo 33 días después de ser elegido Papa --. Benedicto XVI improvisó esas palabras al término de la audiencia general, al dirigir su saludo en italiano «a los fieles de la diócesis de Belluno-Feltre que, junto a su obispo monseñor Giuseppe Andrich», acudieron a Roma «para hacer agradecida y orante memoria» del siervo de Dios, Juan Pablo I en el aniversario de su muerte.

NOTICIAS DEL MUNDO FRANCISCANO – CAPUCHINO

La Viceprovincia General del norte de América Central, Ntra. Sra. de la Esperanza, celebra los cincuenta años de su reimplantación en Guatemala.

En el año 1872 eran expulsados violentamente por las autoridades gubernamentales de Guatemala todos los miembros, tanto españoles como guatemaltecos, pertenecientes a la Orden Capuchina residentes en esta nación con el V.P. Esteban de Adoáin a la cabeza. Será el año 1956, hace ahora cincuenta años, cuando, a requerimiento de la Santa Sede los hermanos capuchinos vuelven a la misma, correspondiéndole a la Provincia española de Andalucía el hacerse cargo de esta misión, que, en un principio, envía sólo a dos hermanos, Luis de Ausejo y Domingo de Madrid para comenzar esta misión. Estos iniciaron su labor apostólica, junto con la reimplantación de la Orden, un 9 de noviembre del antedicho año, primero en el Departamento del Progreso, para más tarde trasladarse al de Chiquimula por indicación y ruego del obispo de Zacapa, el franciscano Constantino Luna. Aquí funda la primera fraternidad, precisamente en el mismo lugar donde el V.P.Esteban de Adoain lo había pretendido casi un siglo antes, y desde aquí se fueron extendiendo por los lugares que el mismo obispo proponía, de acuerdo con el número de religiosos que la Provincia enviaba, según sus posibilidades.
El sábado 11 de noviembre pasado, la floreciente Viceprovincia General Norte de Centro América, que la compone las naciones de Guatemala, El Salvador y Hondura, titulada de Ntra. Sra. de la Esperanza, ha querido conmemorar estos primeros cincuenta años de la llegada de aquellos dos capuchinos andaluces a Guatemala. Se tuvo, en efecto, una solemnísima concelebración eucarística que estuvo presidida por el Emmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Arzobispo de Guatemala, D. Rodolfo Quezada Toruño, que, justamente, sucedió a Mons. Constantino Luna en el gobierno del obispado de Zacapa y, por tanto, buen conocedor, por tanto, de la acción evangelizadora ejercida en esta diócesis por aquellos hermanos nuestros. Estuvo acompañado por el Excmo. Sr. Bruno Musaro, Nuncio de S. S. en Guatemala, quien se hizo eco de una propia bendición del Santo Padre, Benedicto XVI, enviada para esta ocasión y por este motivo. Gran número de sacerdotes, capuchinos en su mayoría, ocupaban el presbiterio como concelebrantes, entre los que se veían a los Ministros Provinciales de Varsovia, Nueva York y Andalucía.
Todo sucedió y desarrollo de manera casi perfecta. Merece destacarse, sin embargo, la preciosa homilía del Sr. Cardenal que se notaba le salía del corazón por lo objetiva y sincera, recordando el duro trabajo inicial de aquellos hermanos nuestros a su llegada. Pero todavía una nota sobresaliente más hubo al finalizar la Eucaristía, cuando el hermano Viceprovincial, Bernabé Sagastume, hace entrega al Provincial de Andalucía una placa conmemorativa en la que se lee “Gracias, Hermanos de Andalucía, España, por haber fundado la Orden Capuchina en la parte nororiental de Guatemala hace 50 años, un 5 de noviembre de 1956. Que la Divina Pastora, Patrona de las Misiones Capuchinas, proteja y acompañe a los Hermanos de tan querida Provincia Madre.

Guatemala, 11 de noviembre de 2006.