Cripta (1)

ImágenesCapilla y Cripta de Fray Leopoldo (1)        

Frescos-Grafito del P. Hugolino de Belluno

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

El P. Hugolino nació el 15 de diciembre de 1919, en Belluno. Después de los estudios de humanidades, filosóficos y teológicos, y, tras su ordenación sacerdotal, pudo frecuentar la Academia. Desde 1945 a 1950 asistió al Instituto d Arte Beato Angelico de Roma, la Scuola d’Arti Ornamentali y la Accademia delle Belle Arti, siempre en Roma. Tras sus estudios en las distintas Academias, realizó algunos cursos de especialización en la técnica del grafito y en la pintura mural. Después ha continuado estudiando a través de viajes o residiendo algunas temporadas en países culturalmente significativos como Francia (1947), Suiza (1949); España (1954), Inglaterra (1955), Alemania (1960), Bélgica y Holanda (1962), Grecia (1969), India y Nepal (1976), Amazonia, Brasil y Perú (1980), Tanzania (1982)… En España le ha interesado, sobre todo, la pintura de Goya… 

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

Con tan sólo esta obra de arte de Granada no se puede poner de relieve la figura compleja del P. Hugolino como artista, ya que su ciclo pictórico comienza hace más de cincuenta años y se extiende no sólo por Italia sino que abarca también parte del extranjero. Él comienza a trabajar en Suiza, apenas terminados sus estudios en la Academia de “Bellas Artes”, con un retablo en Val Peschiamo, en 1950. En 1957 va a Inglaterra para pintar tres cuadros en Oxford, un retablo en Birmingham y un mural en la Iglesia de Santa Clara. Su última exposición en el extranjero tuvo lugar en Aquisgrán, en 1984.

En su vasta producción artística el P. Hugolino se expresa con distintas técnicas: con vidrieras historiadas y dalles, con el fresco, el mosaico, la pintura al óleo, pero, sobre todo con el grafito, que es una invención suya, o, mejor, una reactualización suya con materiales modernos constituida por un empaste de argamasa policroma superpuesto, estrato tras estrato, y esgrafiada al fresco. Así el artista renueva los éxitos históricos de la pintura mediterránea que es típicamente mural y monumental, comenzando por los etruscos, continuada por los romanos, practicada en el Medievo, alcanza cimas altísimas con Cimabue y el Giótto, en el Renacimiento con Massaccio, Mantegna y el Beato Angélico, con Miguel Ángel y Rafael, y en el 1600 los Caricci hasta el Tiépolo en el 1700. Se estancó en el 1800, artísticamente, en el positivismo expresivo, para volver de nuevo en este siglo con Saetti, Ferrazzi, Longaretti, el maestro Severeni y el P. Hugolino su alumno aventajado.

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

En la capilla cripta de Fray Leopoldo, el artista ha utilizado la técnica del grafito, con gran eficacia y modernidad. Esta obra, como todas las suyas, además de ser un acontecimiento artístico y cultural, es también un acontecimiento pedagógico y catequético, dada su preparación específica en Sagrada Escritura, Teología y Liturgia. En España, su única obra es este fresco-grafito de la capilla-cripta de Fray Leopoldo, de la iglesia de los PP. Capuchinos de Granada que puede considerarse su obra cumbre y su testamento espiritual, por ser la última que realizó estando ya enfermo. 

Ciertamente que el P. Hugolino necesitó un largo camino para que su vocación artística y su vocación religiosa llegaran a una pacífica y plena convivencia como él mismo manifiesta en una reciente entrevista: “Desde muy joven sentí ambas vocaciones: si en un principio no podía ni siquiera imaginar que ambas irían de acuerdo, ahora, tras un largo y fatigoso camino, puedo declarar con satisfacción que estos dos amores se han desposado y que la pintura se ha convertido en mi verdadero y propio apostolado. El lienzo, la pared, la vidriera se convierten de vez en cuando en la páginas de un libro ideal, donde humildemente, trato de traducir mi catequesis, destinada a los fieles, en expresiones de fe y poesía. Este sentido de alegría, típicamente franciscano, recorre toda mi obra, desde los cuadros en los que evocando versículos bíblicos alaban al amor, a la confianza en Dios, hasta las composiciones fantasmagóricas de estrellas aves, animales, plantas, flores y las notas gregorianas de los frescos donde culmina esta explosión de vitalidad”.

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

Capilla y Cripta de Fray Leopoldo

Vitaliano Tiberia, Presidente de la Pontificia Academia de las Bellas Artes en el Panteón, escribió en L’Osservatore Romano en un homenaje celebrado dos días antes de la muerte del artista: “Las obras del P. Hugolino, incluso allí donde la decoración (siempre rica en sugestiones cromáticas) sigue la forma ‘difícil’ de la expresión simbólica, como en el extraordinario contrapunto de palabras y notas musicales en la cripta-capilla de Fray Leopoldo de Alpandeire, en Granada, ilustran constantemente la sacralidad en su contenido más misterioso. Y es precisamente con esta última obra española (1998) llena de sugerencias luminoso-musicales, como el P. Hugolino parece quererse despedir de nosotros, conocedores como él del supremo valor del arte sacro que ha hecho comprensible a lo largo de los siglos el difícil pensamiento de san Pablo que quiere que Cristo sea imagen verdadera y visible del Dios invisible. ¿Es su sello artístico? ¿Su testamento espiritual? Es ciertamente una profesión de fe renovada y un acto de confianza en la posibilidad, a pesar de todo, de continuar haciendo arte.

Fr. Alfonso Ramírez Peralbo
Vicepostulador

Imágenes